La nueva línea de AVE, que enlaza Barcelona, Girona y Figueres, completa los 804 kilómetros de la Línea de Alta Velocidad que une Madrid con Barcelona y la frontera francesa y ha supuesto una inversión superior a 3.700 millones de euros.
El tramo Barcelona-Figueres fue inaugurado el pasado 8 de enero por el Príncipe de Asturias, acompañado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; el presidente de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas, y la ministra de Fomento, Ana Pastor. Por parte de COMSA EMTE asistió el presidente, Jorge Miarnau, junto al consejero delegado Josep Miarnau, y al director general de Ingeniería, Guillermo Lorenzo.
COMSA EMTE ha participado en la infraestructura con trabajos como las instalaciones de línea aérea de contacto y el alumbrado de túneles del nuevo tramo, que permite enlazar las cuatro capitales catalanas con el resto dela Península. Lalínea inaugurada se integra en el Corredor Mediterráneo, infraestructura que conectará todo el litoral desde Cataluña hasta Andalucía.